
Como en Bienvenido Mr Marshall, las autoridades políticas aragonesas, con PSOE y Partido Aragonés a la cabeza, se han puesto sus mejores galas para recibir a los extranjeros que traerán ese maná que empedrará de oro el desierto de Los Monegros. El Gobierno de Aragón se ha comprometido a facilitar las infraestructuras, los suministros de energía y agua, dotar de terrenos a los promotores y “adecuar la normativa administrativa aplicable a los requerimientos específicos del proyecto”. En este último capítulo se incluye, por ejemplo, el cambiar la ley del juego, que no permite más de un casino por provincia.Aparte de la lógica alegría de los lugareños al conocer las dimensiones del proyecto, las críticas no se han hecho esperar....